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Nota de prensa

El Ayuntamiento de Utebo muestra su rechazo a la reforma de la administración local propuesta por el ejecutivo central del Partido Popular

El pleno del consistorio aprobó, en el transcurso de su última sesión ordinaria del 16 de mayo, una moción conjunta del equipo de gobierno PSOE-IU en la que se rechazaba el texto del anteproyecto de ley para la racionalización y sostenibilidad de la administración local, así como que exigió la convocatoria de una asamblea extraordinaria de la FEMP para tratar este asunto.

[Utebo, 22 de mayo de 2013]

Con el voto a favor de PSOE (6), IU (2) y CHA (1), el voto en contra del PP (7) y la abstención del concejal no adscrito. Así es como se aprobó, durante el transcurso del último pleno ordinario celebrado en el Ayuntamiento de Utebo, una moción conjunta del equipo de Gobierno PSOE-IU en la que se mostraba el rechazo al texto del Anteproyecto de Ley para la  Racionalización y Sostenibilidad de la administración local y que solicitaba la retirada de dicho anteproyecto. Asimismo, la moción exigía la convocatoria de una asamblea extraordinaria de la FEMP para tratar este asunto y sobre el presente y el futuro del municipalismo. Por último, la moción acordaba elevar al Gobierno Central la propuesta de que cualquier reforma que afecte a las entidades locales deberá contar con la participación de las mismas. Por todo ello, de dicha moción se daría traslado al Gobierno de España, al Gobierno de Aragón, a los grupos políticos del Congreso, del Senado y de las Cortes de Aragón, a la FEMP y a la FAMCP.

En la exposición de motivos que fundaba la moción que ha sido aprobada, se apunta que “la denominada reforma de la administración local no es una reforma sino una demolición” porque “desprecia al gobierno más cercano al ciudadano”.

“Esta reforma –continúa el texto- supone el mayor ataque a los ayuntamientos democráticos en la corta experiencia histórica de los mismos; es una vuelta a la centralización y al papel tradicional de aquéllos como meros ejecutores de las políticas del Gobierno Central”.

En palabras del alcalde de Utebo,  Miguel Dalmau, la reforma de la administración local planteada por el ejecutivo central es “una maniobra para utilizar a los ayuntamientos como brazos ejecutantes de sus políticas”; se trata además de una injerencia “grave” en la gestión municipal ya que, según apunta el primer edil, “el gobierno local no es sólo una administración sino un gobierno elegido democráticamente y como tal con potestad  de autoorganización, por lo que podríamos estar ante una reforma rayana en la inconstitucionalidad”.

“El estado de bienestar alcanzado en este país –continúa Dalmau- es fruto de la calidad de los servicios que, durante muchos años, han prestado a los ciudadanos los ayuntamientos, que, a fin de cuentas, son los más cercanas a los vecinos y son las que dan respuestas de manera más directa a sus necesidades. El hachazo al gobierno local que plantea el Gobierno Central con esta reforma, disfrazándola de mera reforma de la administración, implicará la privatización de muchos servicios, que pasarán a ser menos y, por supuesto, más caros y de peor calidad. En definitiva, a mi juicio, ya no sólo como primer edil de Utebo sino también como el ciudadano ferviente defensor de lo público que soy, considero que esta reforma es un atropello en toda regla, un ataque frontal al ciudadano, y a la función pública como garante de una independencia política y económica.

Para la Primera Teniente de Alcalde, Rosa Magallón (IU), se trata de una “maniobra más del Partido Popular para privatizar los Servicios Públicos, pues resta competencias a los municipios de menos de 20.000 habitantes, en materias tan importantes como Acción Social, Educación, Medio Ambiente, Igualdad y Salud, en favor de las Diputaciones Provinciales. Sin que conste en ningún momento del anteproyecto cómo piensa dotar a estas arcaicas instituciones de los medios y dotación necesarios para prestar estos servicios básicos a los ciudadanos” concluye la edil.


Confiamos en que estas palabras se traduzcan en  diálogo y en iniciativas que hagan partícipes a los trabajadores, tan directamente afectados por el texto de este Anteproyecto. (ORS)

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